miércoles, 23 de febrero de 2011

Plaza de la infancia.





Nunca te acostarás sin conocer un lugar más...
Pues sí, es totalmente cierto esto que digo, puesto que pocos nombres de calles, plazas o avenidas hay ya que me sorprendan; y mira que a diario paso por unas cuantas de ellas.
Todo ha empezado cuando en la hoja de ruta del día, he leído lo que en principio creía que era de todo menos plaza de la infancia lo que había escrito en el folio.

Es un parque como cualquier otro de Madrid. Es más, yo diría que más bien es pequeño y muy frio.
Pero el encanto lo he encontrado en que está situado
en una de esas colonias privilegiadas y muy caras de 
la capital; a escasos metros de la nueva zona financiera y del bullicio de las grandes y ruidosas avenidas.
 
Calles vacías, columpios solitarios, bancos polvorientos, esperando a que llegasen sus pequeños huespedes. Ese ha sido el estímulo para que, sin mucha dificultad, me haya trasladado en el tiempo para buscar recuerdos, sensaciones, anecdotas, 
de cuando hace no mucho tiempo, era un loco asiduo
más de estos lugares.

Rodeando el pequeño pero acogedor parque, no he podido resistirme a captar con mi cámara un cartel no homologado. Un cartel que algún vecino lo mismo molesto, pero seguramente comprometido con el barrio y seguro que un tanto cachondo, se puede leer: "Recoger la caca del perro gracias".
Cachondo, porque es una de esas cosas que dicho de una manera seria y monótona, como el resto de señales oficiales, no llamaría la atención como lo hace ésta; seguro que los vecinos la hacen más caso debido a esta cercanía.

Haciendo esta última foto, ha sido cuando por primera vez, he sentido que no me encontraba sólo en la plaza. Resulta que allí estaba; silencioso y al tanto de todo lo que ocurría, el que parecía dueño de esa señal del perro, del propio parque, y si me apuras, del barrio mismo. El señor felino, seguro que estaba observándome antes de que yo me diese cuenta.

El nombre de la plaza ha tomado fuerza cuando me han venido a la cabeza muchos de esos buenos ratos compartidos con mis pequeños grandes amigos de la infancia.
Esperabamos a que estuviesen las papeleras llenas para así poder empezar una competición a ver quién le daba más vueltas sin que nada cayese al suelo.... daba igual quién ganase, siempre nos reíamos de ver como salía la basura volando... cosas de críos.

Esos toboganes oxidados que se elevaban inmensos  hacia el cielo, en los que muchas de las veces bajábamos de cabeza y sin usar la rampa debido al generoso empujón de uno de tus mejores amigos... cosas de críos.

Esos primeros columpios multifuncionales, con cadenas y asientos de hierro macizo llenos de tornillos oxidados, los cuales servían sólo para balancearte, lo mismo para hacer competiciones de salto de longitud con sus correspondientes aterrizajes con la boca, rodillas o culo. O también una portería reglamentaria recogiendo los dos columpios en sus crucetas... cosas de críos.

Antoñito, Quique, Baby, Enrique, Mayte, Jordi, Vane, Miguel, Javi, Alberto,.... gracias por hacer de nuestro parque de Aguilar del Río, nuestra propia propia plaza de la infancia. Un lugar en el que todo era amistad, inocencia y lealtad,  en el que tiempo se paraba para jugar y no había relojes que nos marcasen las horas; como parecen hacer a nuestros pequeños con la desafortunada ubicación en la foto del parquímetro por el Ayuntamiento, al que sólo le falta hacer sacar tique a los niños para jugar.


P.D.: Perdonadme porque seguro que alguien se me ha
quedado en el tintero.
                                                            

6 comentarios :

  1. Como siempre hermano, nos vuelves a sorprender con unas geniales fotos y unos textos llenos de vida y sentido.
    Muchas gracias por darnos un pedacito de tu niñez
    JAJA mi prefería??? la del cartel del perro, cojonuda!!!! (con perdón jejeje)

    Un abrazo y NO PARES !!!!!

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  2. ¿Que hay de nuevo Ferny? Gracias por el comentario, amigo. No son fotos de album, eso etá claro, pero si son fotos con mucho significado para mí y seguro que para muchos de vosotros.
    Ese padacito de mi niñez lo comparto gustosamente porque estoy muy orgulloso de la gente con la que jugué y crecí.
    Además, ya comenté en otra entrada que para mí recordar es vivir dos veces.

    Ni perdón ni ná, yo también cuando vi el cartel dije: esta es cojonuda, foto!!! :)

    Un abrazo y no; no paro, no paro!

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  3. Muy bonito! me ha gustado mucho!gracias Dani por abrir tu corazón! y gracias por transportarme a nuestra infancia, como bien has dicho existía la amistad, la inocencia y la lealtad!! que valores mas bonitos. Que bien nos lo pasábamos, como llenábamos de vida el parque!! para nosotros era "la oribera" (de el bar los ribera) recuerdas? que tardes tan buenas que buen equipo hacíamos grandes y pequeños.........con nuestra imaginación y la unión de todos construíamos coches, la estructura la sacábamos de unir dos carros de esos para llevar las bombonas de butano, y nos daba las tablas los de las maderas, recuerdas? y luego hacíamos carreras con los del numero 2 o peleas hasta que el algún coche se rompiera, uno se montaba y los otros empujaban jajajaja :))
    la de cosas que inventariamos con estos parques tan modernos!!
    Si realmente Gracias a Todos por que yo he tenido una infancia muy buena y parte de ella es por los amigos de entonces..... Baby :)

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  4. Que alegría me da encontrarte por aquí, Baby!
    Como no me voy a acordar de tantos ratos en la oribera con todos vosotros. Sois mis primeros amigos y eso marca, y se lleva en el corazón.
    Ya ves, fue encontrar este pequeño parque con ese nombre y enseguida me vinisteis todos a la cabeza.

    La señora del bajo de mi portal que nos pinchaba los balones cuando se nos colaban en su patio, los partidos de beisbol que nos hacíamos en el campo del butano, las competiciones de coches super currados que hacíamos con los del 2 como bien dices, las noches de verano hasta las tantas jugando y nuestras madres sentadas en el banco de cháchara, las guerras con los del patio de al lado con los "quitamoños" de los árboles, que acabábamos con piedras cuando escaseaba la munición,... cosas de críos.

    Creo que ahí estaba lo bueno, en que nos teníamos que currar la diversión por nuestros propios medios (y lo conseguíamos muy facilmente), no como a estos peques de ahora que se lo damos casi todo "masticadito" y no se buscan las vueltas para divertirse.

    Un besazo guapa, y me alegro muchísimo de tenerte por aquí.
    ;)

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  5. Como siempre me ha encantado toda la reflexión, pero si lugar a dudas me quedo con la que hace referencia a la última foto "....ubicación en la foto del parquímetro por el Ayuntamiento, al que sólo le falta hacer sacar tique a los niños para jugar." e incluso me voy a atrever a hacer mi propia reflexión.
    Yo iría aún más lejos, el hecho de que el ayuntamiento instalase un parkímetro en la entrada del parque es consecuencia de la vida que estamos eligiendo, todo ha cambiado tanto que parece que son las madres y no los niños como tú apuntas, las que están deseando sacar ticket para "aparcar" a los críos, y no solo en los parques, también en las guarderías, en los colegios, en las casas de las abuelas (Máma, quedate con el niño que me "tengo" que ir de compras) en las actividades extraescolares, en los centros comerciales, en el parque de bolas del Ikea, ...... no teneís la sensación de que a muchas madres (y por supuesto padres) les sobran los niños????
    Se me cae el alma al suelo cada vez que veo a uno de estos "afortunaos" pasando como de comer mierda del crío, más centrados en su carrera profesional o en mirar las características del último iphone25 ó notebook que en oír lo que sus hijos les tienen que decir, y solucionándo el conflicto comprándole al peque otra "nueva", o debería decir otra más, PSP ó Nintendo Ds, como si los peques no tuviesen bastante con el ordenador de sobremesa, la wii, la xbox, la Play y todas las portátiles que ya tienen en casa.
    Así pasa, inevitablemente los parques de tus fotos están abandonados porque los niños juegan en fila, o si me permites la expresión "en batería", pero cada uno embobao con su consola sin apenas levantar la vista de la pantalla ¿qué locura estamos haciendo y que sociedad estamos creando?
    A donde vamos a ir a parar???

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  6. Totalmente de acuerdo Bonham!!!
    Llamenme loco, raro, tarado, pero esos detalles como el del parquímetro, que parecen una simple tontería y que creemos que pasan inadvertidos ante los ojos de nuestros pequeños, me llegan al alma y son las cosas que tenemos de borrar como sea de la infancia de nuestros niños.

    Referente a las madres y padres, y su actitud frente a sus propios hijos, podría ponerte una lista interminable de las atorcidades que los padres cometen con sus hijos; pero voy a mencionar una en concreto que me parece el acabose:
    Mi mujer es educadora infantil; cuando por las tardes llega a casa de trabajar y comentamos la jornada, siempre me deja con la boca abierta cuando me dice que los papas han llevado a la guardería a sus pequeños un día de fiesta. Hasta ahí todo normal, e incluso podréis decir que estoy chalado pues es lógico.
    Lo que me deja helado es que esos papas también han tenido día de fiesta en sus trabajos, y prefieren "aparcar" a los niños en la guarde y pasar el día a su manera, en vez de disfrutar con sus retoños, jugar con ellos, salir con ellos, en definitiva, vivir con ellos su infancia.
    Por eso te comprendo perfectamente y más cuando dices que se te cae el alma al suelo cuando ves como los mayores anteponen sus trabajos, sus carreras y sus estudios, a tratar ya no sólo de educar a sus hijos, sino simplemente, a ver la nueva letra que ha aprendido a escribir, o la sonrisa y abrazo que te da al verte llegar a casa.

    En fin Boham, tema serio y complicado. Pero que entre todas estas reflexiones lleguemos a buen puerto, y que sobre todo sea la mejor opción para "esos locos bajitos".

    Se te echaba en falta por aquí. Un fuerte abrazo.

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